Esta vez no fue en una portada de revista sino sentada en un banco.
Kim Kardashian y su esposo, Kanye West,
se encontraban en el aeropuerto de Los Ángeles viajando como cualquier
otro pasajero común. En vez de recibir el usual tratamiento VIP, la
pareja pasó por todo el procedimiento estándard que cualquier otra
persona tiene que hacer.
Luego de pasar el punto de seguridad, la estrella E! se sentó a poner sus zapatos de nuevo y fue ahí donde reveló un poco más de lo que habría querido.
Sin saber que había pasado y mucho menos que hasta la habían fotografiado, la Kardashian de 34 años siguió su camino por el terminal del aeropuerto de la mano de Kanye.
Como no es de extrañar, la fashionista lució estupenda en jeans que
remarcaban muy bien sus curvas, camisa ajustada, saco de cuero, una
bufanda de piel y por supuesto los perfectos tacones que jamás pueden
faltar.
Por su parte West, con su look característico de sweater negro con capucha, camiseta y jeans, acompañado de zapatos marrones.
Viajaron a la ciudad de Nueva York, donde luego Kim compartió una foto con sus seguidores de Instagram junto a su esposo, ambos con otro atuendo, obviamente espectacular.
Antes de que terminara el año, Kim se tomó un momento para aclarar los falsos rumores que envolvía a Kimye. “No estoy embarazada”, dijo Kim que ha admitido publicamente sus deseos de convertirse en madre por segunda vez.
A la vez, aprovechó para hablar sobre Kanye y ella, “no estamos teniendo problemas matrimoniales. Estamos literalmente obsesionados el uno con el otro”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario